Make-Up Cleansing Oil

Make-Up Cleansing Oil

ES PARA TI SI...

Si buscas un limpiador que disuelva totalmente el maquillaje, atrape la suciedad acumulada y mantenga tus poros limpios y sin obstrucciones.
Si necesitas un limpiador que mantenga la hidratación en tu piel.
Si buscar aportar luminosidad y suavidad a tu rostro.
La limpieza facial es un paso imprescindible en cualquier rutina facial. En él eliminamos las impurezas, tanto los que genera la propia piel (secreción grasa, sudor, toxinas), los restos de los productos que aplicamos (como el maquillaje o protector solar) y la suciedad que se ha depositado del entorno, como la procedente de la polución.
Por eso la limpieza facial es importante siempre y para todos: no importa si te maquillas o no, o si vives en un entorno urbano o rural. Tu piel necesita limpiarse para mantenerse sana ya que de lo contrario los poros se obstruyen y aparecen granitos, puntos negros e imperfecciones. La piel pierde luminosidad y vitalidad.

BIOTECNOLOGÍA VERDE: EL ESCUALANO ES MÁS PURO Y SOSTENIBLE

El escualano es un aceite hidratante con una estructura molecular muy similar a la de los lípidos de la piel. Debido a su gran afinidad natural con la piel, este lípido ligero se absorbe fácilmente sin dejar residuos grasos. Eficaz emoliente, el escualano se utiliza para ayudar a proteger la barrera cutánea y retener la hidratación, con lo que conseguiremos una piel más suave y tersa.
La demanda de escualeno en cosmética se cubrió durante casi un siglo íntegramente con el aceite de hígado de tiburón. La preocupación por la conservación de estos animales hizo que la comunidad científica buscara otras opciones para su obtención. La primera que se utilizó fue a partir del aceite de oliva. Su problema radica en la dificultad de extracción y su dependencia de las condiciones climáticas, lo que se traduce en problemas para cubrir la demanda y su inconsistencia lote a lote.
Una nueva esperanza capaz de sustituir al escualeno animal y vegetal tradicional ha surgido gracias a la biotecnología moderna: el escualano. A través del proceso de fermentación, la levadura Sacharomices cerevisiae convierte la sacarosa de la caña de azúcar, en la molécula de escualano sintética, esencialmente inodora, estable y con una composición consistente de lote a lote y muchísimo más sostenible.